Razones por las que deberías incluirlo en tu rutina:
Salud ósea: La vitamina D es crucial para la formación y mantenimiento de huesos y dientes. Ayuda a absorber el calcio y el fósforo, previniendo enfermedades como la osteoporosis.
Funciones fisiológicas: Además de los huesos, la vitamina D está involucrada en múltiples procesos. Regula el sistema inmunológico, participa en el desarrollo cerebral en bebés y niños, y mantiene la salud de la piel. Prevención de enfermedades: Estudios sugieren que niveles adecuados de vitamina D pueden reducir el riesgo de osteoporosis y fracturas. También puede ayudar a prevenir otras afecciones.
Exposición solar y alimentos ricos: La vitamina D se obtiene principalmente de la exposición al sol. Sin embargo, algunos alimentos también son fuentes, como pescados grasos, huevos y lácteos.
Consultar con un profesional: Siempre es recomendable hablar con un especialista antes de tomar suplementos. Ellos evaluarán tus necesidades específicas y te orientarán adecuadamente.
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